domingo, 8 de abril de 2012

4 no, 5 días sin mis hijos

Cuan cortos pueden llegar a ser 4 días de vacaciones como estos de Semana Santa o como de largos pueden parecerte cuando estás deseando volver a ver a tus hijos.

El otro día charlaba con unos amigos, padres también, sobre el hecho de tener a tres niños en casa y estar yo solo. Comentábamos el estrés que a veces provocan, quieras o no son niños y pueden ser muy intensos, el cansancio que te generan y el que hay momentos en los que darías cualquier cosa por que te dejaran tranquilo, al menos un ratito. Pero es cierto, y ellos también lo reconocían, que cuando no están, o cuando, aun estando, todo está en silencio sientes la falta de algo, los echas de menos, porque los niños son la alegría de la vida.

viernes, 6 de abril de 2012

El soldadito de plomo

Hacía bastante que no publicaba ningún cuento, así que hoy aprovecho para compartir esta versión de un clásico de Hans Christian Andersen


Érase una vez un niño que tenía muchísimos juguetes. Los guardaba todos en su habitación y, durante el día, pasaba horas y horas felices jugando con ellos. Uno de sus juegos preferidos era el de hacer la guerra con sus soldaditos de plomo. Los ponía enfrente unos de otros, y daba comienzo a la batalla.

Cuando se los regalaron, se dio cuenta de que a uno de ellos le faltaba una pierna a causa de un defecto de fabricación. No obstante, mientras jugaba, colocaba siempre al soldado mutilado en primera línea, delante de todos, incitándolo a ser el más valiente.

Pero el niño no sabía que sus juguetes durante la noche cobraban vida y hablaban entre ellos, y a veces, al colocar ordenadamente a los soldados, metía por descuido el soldadito mutilado entre los otros juguetes. Y así fue como un día el soldadito pudo conocer a una gentil bailarina, también de plomo. Entre los dos se estableció una corriente de simpatía y, poco a poco, casi sin darse cuenta, el soldadito se enamoró de ella.

miércoles, 4 de abril de 2012

Lorax, y a bailar!

No se cuando fue la última vez que salí bailando de un cine, si es que en alguna ocasión lo he hecho, pero desde luego ayer sí que fue así. Mi hijos y yo, además de unos cuantos pequeños y algún adulto un poco cortado, nos animamos con el tema final de la película y, mientras aparecían en la pantalla los títulos de crédito, fuimos bajando la escalera del cine bailando, como en aquella escena al final de la película Una jaula de grillos mientras cantan "We are family".

Aprovechando las vacaciones escolares y el mal tiempo que está haciendo, que no permite realizar muchas actividades en la calle, ni disfrutar de las procesiones de Semana Santa, decidimos ayer por la tarde irnos al cine a ver Lorax. En busca de la trúfula perdida, que tantas ganas tenía de ver con mis hijos, por las cosas que había leído sobre el mensaje de cuidado del medio ambiente que transmite, muy bueno para nuestros pequeños.

lunes, 2 de abril de 2012

Domingo de Ramos en Morón

Parte de mi pubertad, desde los 12 años hasta la universidad, viví en Morón de la Frontera, una localidad de la provincia de Sevilla donde mis padres se trasladaron por trabajo, y allí se han quedado hasta hoy.

Yo, cuando comencé en la facultad, me instalé en Dos Hermanas y, al principio por los estudios y las nuevas amistades, después por el trabajo y la pareja, poco a poco fui yendo cada vez menos, hasta sólo hacerlo, como suelo decir, en las "fiestas de guardar".

Pues bien, uno de esos días señalados en el calendario, en los que se va al pueblo a visitar a los abuelos (mis padres), suele ser el Domingo de Ramos.

Compártelo

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...