Hacía tiempo ya que no surgía esta propuesta durante una cena o comida, anoche Nicolás volvió a plantearla "¿Papá, hablamos de algo?", y es que a veces nuestras comidas son muy ilustradas.
Sentados en la mesa, bien ellos solos mientras yo hago otras cosas en la cocina, o todos juntos, como cuando comemos los fines de semana, ya que entre semana comen en el comedor del colegio, proponen que conversemos sobre algún tema, algo que algunas veces temo, pues parece que por el mero hecho de ser padre debes saber de todo como si fueses una enciclopedia, pero respondo "¿de qué queréis que hablemos?".
Los temas propuestos por cada uno son de lo más variopinto, como ya podréis imaginar, desde cualquier cosa que les haya llamado la atención, hayan visto u oído, a lo más habitual que es hablar de algo que estén estudiando en el colegio: los dinosaurios, el cuerpo humano, el espacio, Egipto, los piratas...
Conversamos y compartimos los conocimientos, pocos o muchos, que tenemos del tema, sin miedo a decir barbaridades, son niños, cada uno opina y aporta sus ideas al respecto, y todos aprendemos algo, incluso yo, porque en ciertas cosas ellos ya saben más que tú, ¿o es que si no es por Parque Jurásico sabríamos algo de dinosaurios?, en cambio ellos se saben los nombres de todos, como es cada uno, qué comen...
Durante la cena de anoche, el tema elegido fue... los galos.
"Papá cuéntanos algo de los galos".
En ese momento se me vino a la mente aquel chiste del que para un examen de historia sólo se había estudiado los romanos y le preguntaron por... los galos, por ejemplo. "Los galos lucharon en las guerra de las galias con los romanos: los romanos fueron un pueblo...."
Sentados en la mesa, bien ellos solos mientras yo hago otras cosas en la cocina, o todos juntos, como cuando comemos los fines de semana, ya que entre semana comen en el comedor del colegio, proponen que conversemos sobre algún tema, algo que algunas veces temo, pues parece que por el mero hecho de ser padre debes saber de todo como si fueses una enciclopedia, pero respondo "¿de qué queréis que hablemos?".
Los temas propuestos por cada uno son de lo más variopinto, como ya podréis imaginar, desde cualquier cosa que les haya llamado la atención, hayan visto u oído, a lo más habitual que es hablar de algo que estén estudiando en el colegio: los dinosaurios, el cuerpo humano, el espacio, Egipto, los piratas...
Conversamos y compartimos los conocimientos, pocos o muchos, que tenemos del tema, sin miedo a decir barbaridades, son niños, cada uno opina y aporta sus ideas al respecto, y todos aprendemos algo, incluso yo, porque en ciertas cosas ellos ya saben más que tú, ¿o es que si no es por Parque Jurásico sabríamos algo de dinosaurios?, en cambio ellos se saben los nombres de todos, como es cada uno, qué comen...
"Papá cuéntanos algo de los galos".
En ese momento se me vino a la mente aquel chiste del que para un examen de historia sólo se había estudiado los romanos y le preguntaron por... los galos, por ejemplo. "Los galos lucharon en las guerra de las galias con los romanos: los romanos fueron un pueblo...."
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